La ceremonia del té en Japón es nombrada como "chanoyu" (茶の湯 - agua caliente para el té) o "chado" (茶道 - el camino del té - en un plano más teórico) y es una forma de dar la bienvenida y mostrar su respeto a los invitados, por eso se hace con la exquisita variedad de té verde en polvo "matcha". Las reuniones entorno a una ceremonia de té son designadas como "chaji" (茶事) o "chakai" (茶会 - más informal).
Es un acto cultural que se transmite en escuelas de té y lo más difícil no es memorizarse los pasos a seguir, sino transmitir calma en cada movimiento para no alterar la paz interna del espectador (los principios de esta ceremonia están basados en la filosofía budista-zen) y elaborar el té con el mejor sabor posible. No consiste en aprender la teoría con la cabeza, sino con el cuerpo y su estado de ánimo; por eso ningún maestro enseña con libros, sino con la práctica.
Una vez terminada la preparación del té se ofrece a los invitados junto con un dulce que se ha de tomar antes de beber el té para equilibrar el "Yin-Yang" (lo dulce y amargo).
En la ceremonia del té japonesa está presente la armonía de las personas con la naturaleza, el respeto por todo, la pureza de actos y la calma del corazón. Debe ser entendida como una forma de alcanzar la armonía con el universo, un intercambio espiritual entre anfitrión y huéspedes, una apreciación de la belleza que transmiten los hechos cotidianos cuando se hacen con respeto... por eso el entorno donde se practica debe ser también trabajado, se suele celebrar en una habitación especial destinada a tal efecto.
La sala de té
Es la habitación donde se prepara la ceremonia del té y destacan tres áreas: la zona del anfitrión o "temae datami" (donde se prepara el té), la zona de los invitados (con una zona destacada para los invitados especiales: "kinin datami") y la zona para mostrar respeto y la unión entre anfitrión e invitados "tokonoma" (una especie de altar).
Antiguamente las casas de té eran sitios reservados para los jefes. Luego cambiaron las costumbres y se estableció como un sitio tranquilo donde los guerreros y jefes debían de dejar a un lado las katanas antes de entrar a tomar el té. Al dejar sus katanas en ese espacio, también estaban dejando su rango y categoría igualándose todos.
El "tokonoma" es un espacio pequeño (no más grande que el tamaño de un tatami) pero muy importante significativamente hablando, porque es donde el anfitrión expresa su hospitalidad y es lo primero que los invitados ven a modo de bienvenida.
Suele estar decorado con un pergamino de caligrafía o pintura japonesa "kakejiku" que el anfitrión escoge especialmente para esa ocasión y esos invitados. Cuando el invitado entra en ese espacio debe mostrar su respeto al anfitrión haciendo una inclinación del torso a modo de reverencia y aprecio del texto seleccionado.
Suele estar decorado con un pergamino de caligrafía o pintura japonesa "kakejiku" que el anfitrión escoge especialmente para esa ocasión y esos invitados. Cuando el invitado entra en ese espacio debe mostrar su respeto al anfitrión haciendo una inclinación del torso a modo de reverencia y aprecio del texto seleccionado.
Las palabras del pergamino suelen constar de cuatro letras y son palabras respetuosas que animan a tener una fuerza positiva y sirven para mostrar un acercamiento entre anfitrión e invitados.
La salita también se suele decorar con una flor "ikebana" (el arte japonés de presentar las flores naturales) pero no de forma ostentosa, pues de lo que se trata es de librarse de lo superfluo que vemos, transmitir la unión de nuestro espíritu con el fluir de la naturaleza y evocar a esa energía con el pensamiento.
La salita también se suele decorar con una flor "ikebana" (el arte japonés de presentar las flores naturales) pero no de forma ostentosa, pues de lo que se trata es de librarse de lo superfluo que vemos, transmitir la unión de nuestro espíritu con el fluir de la naturaleza y evocar a esa energía con el pensamiento.
Es importante tener un amplio conocimiento de la poesía, el arte y los elementos naturales que destacan en cada estación del año, pues es necesario tenerlos en cuenta para decorar una sala de té.
Después de mostrar sus respetos en la parte del "tokonoma" cada invitado toma asiento y el anfitrión comienza la preparación del té.
Las herramientas
Antes de entrar en detalle con la ceremonia os presentamos los utensilios necesarios. Se trabaja el tacto con herramientas de materiales naturales como la madera, el bambú, el barro y la piedra para sentir la naturaleza. En la ceremonia del té quedan representados los cinco elementos el metal (la olla o tetera), la madera (el carbón vegetal), la tierra (la cerámica), el fuego y el agua.
Se necesitan alrededor de una docena de piezas, la base de piedra para encender el fuego, la olla para calentar el agua ("kama"), el cazo de bambú para tomar el agua ("hishaku"), un apoyo para el "hishaku" (habitualmente de bambú o algún elemento natural), el cuenco de cerámica para preparar el té ("chawan"), la batidora de bambú ("chasen"), la cajita de madera lacada donde se guarda el matcha, la cucharita de bambú medidora de té ("chashaku"), un recipiente con agua del tiempo y otro para desechar el agua que se utiliza para limpiar cada cosa, también un pañuelo para limpiar de modo más ceremonioso y otro blanco para secar.
Y por supuesto un maestro de ceremonia vestido de forma tradicional. En sus orígenes sólo había maestros varones hasta mediados del siglo XIX cuando se abolió la clase guerrera. En la actualidad las mujeres son las que más practican la ceremonia del té.
Y por supuesto un maestro de ceremonia vestido de forma tradicional. En sus orígenes sólo había maestros varones hasta mediados del siglo XIX cuando se abolió la clase guerrera. En la actualidad las mujeres son las que más practican la ceremonia del té.
La ceremonia
El arte de preparar y servir el té varía un poco en función de cada la escuela, por lo que vamos a ofrecer un concepto general.
Durante toda la ceremonia reina el silencio en la sala de té, desde la llegada del primer invitado hasta la consumición del té. A pesar de ser una "reunión" no es necesario emitir ruido para hablar, como hemos visto hay una comunicación no verbal en cada elemento decorativo y una vez comenzado el ritual en cada movimiento del maestro y de los invitados.
Lo más importante de la ceremonia es transmitir tranquilidad, admirar la estética de lo cotidiano y comunicar la pureza del alma de los presentes, para que el té tenga un sabor perfecto.
El ritual más formal "chaji" incluye un aperitivo ("kaiseki") antes de la preparación del té y es cuando se aprovecha para calentar el agua al fuego de un carbón vegetal (no hay que olvidar en ningún momento el contacto con lo natural) y que será aprovechado para mantenerla caliente gracias a las ascuas del fuego apagado. En una ceremonial más informal "chakai", el maestro ha calentado el agua previamente a la entrada de los invitados, porque no hay "kaiseki".
Mientras los invitados toman asiento en el suelo de tatami, el maestro inclina su torso de forma cortés como dando la bienvenida. Cuando todos se han sentado sobre sus piernas, el maestro camina con sosiego hacia donde tiene dispuestos sus utensilios y comienza a limpiar el recipiente de té, la cucharita medidora y el tazón como una forma de purificación simbólica.
Los movimientos tranquilos y rítmicos del maestro al sacar el pañuelo, doblarlo, limpiar, etc. durante esa purificación de las herramientas hace que los invitados entren en un estado de concentración y calma.
Ahora es el momento de preparar el matcha de forma muy espesa, llamado "koicha". El maestro pone todo su esmero y delicadeza al batir el té. Una vez listo se lo ofrece al invitado presentando la parte considerada mejor o más bonita hacia su visión.
El invitado que va a recibir el tazón debe tomar el dulce y luego depositar en su mano izquierda la base del cuenco y estabilizarlo con la mano derecha, haciéndolo girar (suele ser tres veces para conseguir movimientos cortos y pausados que no alteren el espíritu y según sentido de las agujas del reloj para que las mangas del kinomo no golpeen la taza) para no beber de la parte más bonita, para no ensuciarla y como señal de admiración ante tanta belleza. Y antes de sorber, inclina la cabeza a modo de agradecimiento y muestra el tazón alejándolo de los labios antes de beber.
Cuando se termina de dar un sorbo se pone sobre el tatami delante de uno y se limpia con una toalla de papel el lado por el que se ha bebido. Se vuelve a tomar el tazón con la mano derecha y se posa sobre la palma de la mano izquierda, se girar para mostrar la parte más bella al siguiente invitado. Nuevamente volvemos a agradecer su sabor con una reverencia.
Para el "koicha" el mismo tazón se pasa entre todos los invitados y cada uno de ellos toma un sorbo como muestra del sentimiento de unión.
Después se prepara otro té menos espeso pero más espumoso, denominado "usucha". Éste se sirve de forma individual y al recibirlo hay que hacer una inclinación para excusarse por beber primero y antes de beber hay que dejarlo delante de uno y dar las gracias al anfitrión. Igualmente se gira el tazón tres veces para no estropear la mejor parte.
Cuando se termina de beber todo el contenido, se limpia la parte por donde uno ha bebido simplemente con los dedos y se deja enfrente con la parte principal mirando a uno. Es el momento de admirarlo, la forma correcta sería apoyando los codos sobre las rodillas y elevando el tazón hasta su visión. Al devolver el tazón al anfitrión se debe tener en cuenta que éste al recibirlo pueda ver la parte más importante.
Servido el "usucha" ya está permitida la conversación, pero sobre temas relacionados con la ceremonia, por ejemplo sobre los utensilios, la decoración del "tokonoma"... pero de forma organizada y no escandalosa.
Como se ha visto no sólo el maestro tiene que tener una amplia formación en todos los aspectos culturales (shodo, ikebana, poesía, artesanía, repostería, el arte de vestir el kimono, protocolo, etc.), sino que el invitado también para poder interpretar cada elemento. Aún así os animo a que participéis en alguna si tenéis ocasión, pues siempre se puede preguntar al maestro por la simbología.
¿Habéis estado en alguna? ¿En Japón o en España? En esta entrada podéis consultar cómo preparar Matcha en casa.
Lo más importante de la ceremonia es transmitir tranquilidad, admirar la estética de lo cotidiano y comunicar la pureza del alma de los presentes, para que el té tenga un sabor perfecto.
El ritual más formal "chaji" incluye un aperitivo ("kaiseki") antes de la preparación del té y es cuando se aprovecha para calentar el agua al fuego de un carbón vegetal (no hay que olvidar en ningún momento el contacto con lo natural) y que será aprovechado para mantenerla caliente gracias a las ascuas del fuego apagado. En una ceremonial más informal "chakai", el maestro ha calentado el agua previamente a la entrada de los invitados, porque no hay "kaiseki".
Mientras los invitados toman asiento en el suelo de tatami, el maestro inclina su torso de forma cortés como dando la bienvenida. Cuando todos se han sentado sobre sus piernas, el maestro camina con sosiego hacia donde tiene dispuestos sus utensilios y comienza a limpiar el recipiente de té, la cucharita medidora y el tazón como una forma de purificación simbólica.
Los movimientos tranquilos y rítmicos del maestro al sacar el pañuelo, doblarlo, limpiar, etc. durante esa purificación de las herramientas hace que los invitados entren en un estado de concentración y calma.
Ahora es el momento de preparar el matcha de forma muy espesa, llamado "koicha". El maestro pone todo su esmero y delicadeza al batir el té. Una vez listo se lo ofrece al invitado presentando la parte considerada mejor o más bonita hacia su visión.
El invitado que va a recibir el tazón debe tomar el dulce y luego depositar en su mano izquierda la base del cuenco y estabilizarlo con la mano derecha, haciéndolo girar (suele ser tres veces para conseguir movimientos cortos y pausados que no alteren el espíritu y según sentido de las agujas del reloj para que las mangas del kinomo no golpeen la taza) para no beber de la parte más bonita, para no ensuciarla y como señal de admiración ante tanta belleza. Y antes de sorber, inclina la cabeza a modo de agradecimiento y muestra el tazón alejándolo de los labios antes de beber.
Cuando se termina de dar un sorbo se pone sobre el tatami delante de uno y se limpia con una toalla de papel el lado por el que se ha bebido. Se vuelve a tomar el tazón con la mano derecha y se posa sobre la palma de la mano izquierda, se girar para mostrar la parte más bella al siguiente invitado. Nuevamente volvemos a agradecer su sabor con una reverencia.
Para el "koicha" el mismo tazón se pasa entre todos los invitados y cada uno de ellos toma un sorbo como muestra del sentimiento de unión.
Después se prepara otro té menos espeso pero más espumoso, denominado "usucha". Éste se sirve de forma individual y al recibirlo hay que hacer una inclinación para excusarse por beber primero y antes de beber hay que dejarlo delante de uno y dar las gracias al anfitrión. Igualmente se gira el tazón tres veces para no estropear la mejor parte.
Cuando se termina de beber todo el contenido, se limpia la parte por donde uno ha bebido simplemente con los dedos y se deja enfrente con la parte principal mirando a uno. Es el momento de admirarlo, la forma correcta sería apoyando los codos sobre las rodillas y elevando el tazón hasta su visión. Al devolver el tazón al anfitrión se debe tener en cuenta que éste al recibirlo pueda ver la parte más importante.
Servido el "usucha" ya está permitida la conversación, pero sobre temas relacionados con la ceremonia, por ejemplo sobre los utensilios, la decoración del "tokonoma"... pero de forma organizada y no escandalosa.
Como se ha visto no sólo el maestro tiene que tener una amplia formación en todos los aspectos culturales (shodo, ikebana, poesía, artesanía, repostería, el arte de vestir el kimono, protocolo, etc.), sino que el invitado también para poder interpretar cada elemento. Aún así os animo a que participéis en alguna si tenéis ocasión, pues siempre se puede preguntar al maestro por la simbología.
¿Habéis estado en alguna? ¿En Japón o en España? En esta entrada podéis consultar cómo preparar Matcha en casa.
Bellísima foto y bellísimo kimono, estás muy guapa Victoria-san. Por cierto, ¡te he dado un premio en mi blog! ^_^ un beso! Tendrás que nominar a doce y contestar a tres extrañas preguntas, jajajaj.
ResponderEliminarBesos!
Nelly
Gracias por el premio y por el piropo... aunque las de la imagen no soy yo, jejeje... o lo dices por cuando me has visto en persona?? Muchos besosssss!
EliminarA mi me encantaria ir! Todavia no he tenido el honor!
ResponderEliminarPero hay que prepararse bien, como siempre una valiosa informacion.
Intenté que fuera un entrada más corta o hacer varias... pero prefiero que toda la información quede recogida... haré hincapié sobre algunos detalles por facebook a modo resumen :D
EliminarA mi me parece genial asi, y ya estoy deseando leer mas sobre ello en Facebook, jeje!
EliminarQué bien!
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